Al pasear por las calles de Murcia ya nos podemos encontrar a Francisco Rabal. Eso si, mucho hay que pasear para dar con este homenaje al actor. La estatua se sitúa en la plaza de Santa Gertrudis, para los que no dominen el callejero murciano es la plaza que se encuentra en la calle Fernández Ardaviz, esta calle une la Plaza Romea con la Gran Vía. La estatua representa al actor en el papel que interpreto en los Santos Inocentes, y aparece con su milana bonita al hombro.
Aún no he visto la obra de González Beltrán, pero por las fotos creo que ni el lugar, ni la obra están a la altura del actor mas importante que a dado nuestra tierra, sí es cierto que la Filmoteca Regional lleva su nombre, pero esto me recuerda a otro insigne murciano, Francisco Salzillo, que aunque la Gran Vía esta dedicada a él, la escultura que lo representa en la Plaza de Santa Eulalia es insignificante. Me parece desacertado que las redondas de nuestra ciudad se vistan con creaciones oníricas, grandilocuentes, millonarias, y aún así la mayoría feas, y que parezca que a las que van dedicadas a inmortalizar a murcianos ilustres no tengan el empaque suficiente.
Aún no he visto la obra de González Beltrán, pero por las fotos creo que ni el lugar, ni la obra están a la altura del actor mas importante que a dado nuestra tierra, sí es cierto que la Filmoteca Regional lleva su nombre, pero esto me recuerda a otro insigne murciano, Francisco Salzillo, que aunque la Gran Vía esta dedicada a él, la escultura que lo representa en la Plaza de Santa Eulalia es insignificante. Me parece desacertado que las redondas de nuestra ciudad se vistan con creaciones oníricas, grandilocuentes, millonarias, y aún así la mayoría feas, y que parezca que a las que van dedicadas a inmortalizar a murcianos ilustres no tengan el empaque suficiente.
Dardo.
3 comentarios:
¡Qué coincidencia! Dardo, raudo como su nombre, se me ha adelantado esta vez. Hoy vi la noticia de la inauguración de la estatua-homenaje a Francisco Rabal y esta noche le hice unas fotos para escibir un artículo. Pero ya sólo me queda decir que coincido con lo que Dardo deja escrito. Sólo puedo añadir que he visto la escultura de cerca y que sería imposible identificar al gigantesco actor de Águilas con esta falsa emulación. ¡No se parece en nada a su modelo! Así que, no sé si al final es mejor que la estatua no esté muy a la vista.
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En vida no supieron estimarle como debía, y, ahora, lo hacen mal además de tarde.
Invenire siento haberme adelantado, pues de tu pluma seguro tendriamos mejor articulo.
Dardo.
¡No lo sientas, Dardo! Sólo hiciste lo que reza tu nombre, arrebatar la diana a los que todavía estábamos afinando la puntería :-)
Invenire
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